Editorial HASEFER, Bucarest (2011)
Al leer “El mundo debajo del puente”, me di cuenta de que Zoltan Terner ha ido juntando, desde hace años, pedazos de espejo roto, grandes o más pequeños, y los unió, los hizo encajar, queriendo hacer con ellos un espejo nuevo, un espejo sólo suyo. Colocó los pedacitos uno al lado del otro, lo más cerca posible. Tomó una tabla y le echó encima un pegamento especial, capaz de unir vidrio y madera. Dejó que la obra se secara. La luz se reflectaba ahora de una manera bella y extraña. El adhesivo no se había sentado uniformemente y los pedazos del espejo se fijaron con algunas rayas, cada una reflectando la luz y la oscuridad en su propia manera, desde su proprio ángulo. Entonces, Zoltan Terner, el publicista, ensayista, poeta, director de películas, filosofo y hombre de cultura ingenioso consiguió hacer una mezcla fabulosa y fantástica, una pasta hecha de todos estos atributos, y la aplicó por encima, unificando y uniformizando las asperezas y llenando los huecos. Y la dejo de nuevo secar. Más tarde, con un aparato muy especial y muy personal (es su propia invención y no la comparte con nadie) le dio un brillo nuevo. Esta vez, el espejo del mundo debajo del puente y sobre el puente brilla y reflecta hasta lo escondido. Es un espejo mágico, pesado, pero – justamente porque es pesado, su creador lo transformó en un libro. Si lees y miras atentamente, podrás verte hasta a ti mismo. Yo me encontré en este libro. Por narcisismo, pero también por amor al Mundo y preocupación por su destino.
El libro es fascinante. Te lleva a un bello mundo feo de los “sin clase”. Pero también te trae aquí, entre nosotros. Empecé su lectura con miedo de encontrarme con una forma de escribir pesada, difícil de digerir. Este tipo de libros me indisponen. Sorin Vieru, en el prefacio del libro, muy interesante y bueno, advierta sobre un estilo que no es para todo el mundo, un texto mas difícil de leer, para algunos. Cuando se dice esta palabra, “algunos”, me veo inmediatamente a mí. Sin embargo, no tiene razón. El libro se lee con satisfacción e interés, es incitante. Y si la Asociación de los Escritores Israelíes de Lengua rumana lo lanzó, hace poco, en un atractivo coloquio dirigido por el prof. Dr. Andrei Strihan, entonces esto sólo subraya una vez más su buen nivel de intelectualidad.
Zoltan Terner simula y disimula de manera onírica-surrealista. Crea con éxito lo verosímil del inverosímil. Lo sórdido, la oscuridad, la miseria física y moral son presente en las desgraciadas subterráneas. Pero, aquí también hay seres humanos, con cualidades y defectos, bellos porque, al final de todo, la vida es bella. La vida que corre hacia la muerte, junto con toda nuestra tristeza. Aquí les dejo algunos de los nombres de la gente debajo de la puente, los vencidos de la suerte, ahora rufianes y canallas pero que cuentan sobre sus vida por encima del puente, allí donde nosotros también existimos, allí donde ellos ya no están. La pregunta es: ¿dónde estamos nosotros? ¿Abajo? ¿Arriba? El escritor a veces nos apunta con el dedo. ¡Ojala lo quisiéramos ver! Hay el Contador, el Cojo, el Leproso, el Filosofo, el Ladrón, el Cantante, el Otro, la Pequeña del Circo, el Abuelo, el Conde, el Loco, el Loco II, el Muy Loco, el Vagabundo, el Intelectual, La litera, el Bibliotecario loco, el Carnicero, Frida – la asistente medica, el Cineasta Loco, el Hombre Negro, el Manco, el Vendedor de Hermano y muchos más. A estas personas, el escritor les dice, en un momento: “Mis últimos queridos hombres del mundo”. La perspectiva es trágica, y los cuentos que surgen durante este maratón narrativo adquieren sobre todo la luz morada de la oscuridad que se reflecta en el espejo del realismo fantástico firmado por Zoltan Terner.
El talentoso señor en morado, Zoltan Terner, es un escritor cuya locura se esconde detrás de otro motto del libro, de Salvador Dalí: “La única diferencia entre un loco y yo es que yo no estoy loco.” Entonces, ¿qué es usted, Sr. Terner?
Zoltan Terner (n.13 Sept. 1932) es director de películas y televisión, poeta, ensayista, crítico literario y novelista israelí.