“Sentidos falaces, vigilia tornada en sueño o dios embustero. El autor nos embarca en un relato enigmático en el que ni siquiera el cogito ergo sum cartesiano puede alumbrar al protagonista en su tránsito por una cotidianeidad impostada.
Humor, erotismo, sentimientos y, sobre todo, mucho misterio salpican las páginas de “El funcionario de pasiones”, convirtiéndola en una obra difícil de clasificar. Con esta novela, Diego Vadillo estira el surrealismo con el que ha venido coqueteando a lo largo de su trayectoria literaria hasta el terreno de lo kafkiano; y lo hace además con singular maestría.
Escrito con una prosa rica en imágenes y voces olvidadas, quien abra libro debe aprestarse a emprender una lectura tremendamente adictiva en la que las distracciones serán imposibles y las interrupciones, dolorosas.”
IVÁN SOTO SAN ANDRÉS
(Periodista y politólogo)